FRIDA KAHLO: Biografía y obras
Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón constituye una de las figuras más representativas e influyentes en el arte del siglo XX en general y del arte mexicano en particular.
Su fuerte y arroyante personalidad se manifestó y expresó de diferentes maneras a lo largo de su existencia, siendo la pintura uno de los lenguajes a través de los cuales dejo plasmada su propia experiencia vital y sus sentimientos.
Sin duda alguna, el arte ocupó un papel catártico en la complicada vida de Frida Kahlo. Es de este modo, como la artista comienza a plasmar en su obra algunos de los acontecimientos más trascendentales de su vida.
Uno de los mayores logros de Frida Kahlo sea probablemente la capacidad de convertir su propio sufrimiento en algunas de las obras más bellas y significativas del arte del siglo XX.
Su magnífica facilidad para narrar y exponer sus propias experiencias, junto con su potente personalidad y su capacidad técnica hacen que las obras de Frida Kahlo adquiera una originalidad y calidad inigualables, que la han convertido en uno de los iconos sociales y artísticos de nuestro tiempo.
Vida y obras de Frida Kahlo
Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón o en realidad Frida Kahlo como será internacionalmente reconocida, nació el 6 de Julio del año 1907 en la ciudad mexicana de Cayoatcan.
La artista nació en la casa familiar que posteriormente se convertirá gracias a la perseverancia de su marido Diego Rivera en el Museo de Frida y que pasará a ser popularmente conocida como la Casa Azul.
Los padres de Frida fueron su padre Wilhelm Kahlo nacido en Alemania con origen húngaro judío y nacionalizado mexicano y su madre Matilde Calderón de origen hispano mexicano. Museo Frida Kahlo Casa Azul
En realidad, Frida tendría hermanos del anterior matrimonio de Wilhem y de la unión establecida entre su padre y su madre donde nacerían otras tres niñas y un niño que moriría al poco de nacer.
Su infancia no fue fácil aunque se caracterizó por una bonita y entrañable relación entre Frida y su padre cuya complicidad duraría hasta la muerte del mismo. Guillermo Kahlo (como sería llamado en México) se implicaría especialmente en la educación y en el desarrollo de su hija Frida, marcándole de modo definitivo. Gracias a él, la artista recibiría herramientas y recursos personales que le ayudarían durante toda su vida, tal y como reconocería la propia Frida Kahlo en múltiples ocasiones.
De este modo, la infancia de Frida Kahlo se vio marcada por las secuelas que la poliomielitis la dejaría y que harían que tuviera una pierna algo más corta y delgada que la otra. Esta secuela sería utilizada por algunos compañeros para burlarse de ella.
Sin embargo, el padre de Frida lejos de compadecer a su hija la animo y orientó hacia el deporte, favoreciendo que realizase actividades como el boxeo. De este modo Frida comenzó a desarrollar actividades y roles que en la sociedad mexicana de las primeras décadas del siglo XX estaban claramente reservadas a los hombres. Fue con mucha probabilidad estas primeras experiencias las que ayudaron a forjar la personalidad fuerte y libre que la caracterizó.
Sin embargo fue sin duda alguna el accidente de tráfico que sufrió en su adolescencia lo que determinaría muchas de las vivencias y el sufrimiento que posteriormente Frida plasmaría en su obra.
Dentro de esta situación, sería fundamental, tal y como hemos comentado, la figura de Guillermo Kahlo que se convirtió en uno de los principales apoyos de la autora, y que lucharía por forjar el carácter luchador y fuerte de la artista.
De este modo, gracias a la determinación de su padre, la educación que recibiría, se alejaría de muchas de las concepciones y de los estereotipos de género de la época. De este modo, no sólo realizaría deportes que en su época se dirigían a los hombres, sino que también tendría acceso a una formación académica de calidad que determinaría a su vez parte de la concepción del mundo que la caracterizó.
Algunas de las vivencias de infancia de Frida Kahlo se reflejarían en obras posteriores como por ejemplo: “Ella juega sola”, “Niña con máscara de muerte” o en la obra de “Cuatro habitantes de la Ciudad de México” donde una niña vestida de modo tradicional de Tehuana se encuentra chupándose el dedo como símbolo de protección ante la desolación.
Tal y como se ha mencionado desde el punto de vista académico, Frida tampoco recibiría la educación convencional para una mujer en el México de los años 20. De esta manera, en 1922, la artista comenzaría sus estudios en la prestigiosa Escuela Preparatoria de la Ciudad de México. En este periodo estableció amistad con algunas de las figuras que llegarían a ser con el paso del tiempo trascendentales dentro de la historia y la sociedad mexicana.
El grupo de amistades que estableció en este momento recibió el nombre de “los Cachuchas”. Dentro de este grupo únicamente habría dos mujeres: además de ella, estaría Carmen Jaime, ya que en toda la escuela únicamente había 35 mujeres. En este grupo sería donde encontraría a su primer amor, Alejandro Gómez Arias, a quien regalaría una de sus primeras obras autobiográfica (Retrato con Traje de terciopelo).
Con esta obra la artista intentaría volver a conquistar a Alejandro Gómez Arias aunque al final dicha relación se rompería definitivamente.Es en este periodo cuando se produciría el accidente de tráfico que determinaría la vida de la artista. Este accidente se produjo una tarde cuando Frida se encontraba volviendo de la escuela junto a Alejando Gómez Arias y un tranvía chocó contra el autobús donde iban ambos.
Este accidente le ocasionó múltiples lesiones en pelvis y en la columna que obligarían a la artista a someterse a más de 30 operaciones a lo largo de su vida, con el fin de poder mejorar su calidad de vida y que le impedirían ser madre provocándole dos abortos que ocasionarían a la artista un fuerte sufrimiento.
Tras el accidente Frida Kahlo se vio forzada a hacer largos periodos de reposo que le harían replantearse su existencia y sus objetivos, de modo que la artista decidiría dar un verdadero vuelco en sus planes de vida. De este modo, desde el punto de vista profesional se produce un cambio trascendental en sus planes personales y profesionales ya que decide abandonar su idea de orientarse hacia el Derecho y comienza a pintar animada por su padre.
Aunque no sólo variarían sus planes profesionales, ya que desde el punto de vista personal también se verían truncados sus planes de futuro, al romperse la relación que mantenía con Alejandro Gómez Arias al poco tiempo del accidente.
Posteriormente a esta ruptura conocería a Diego Rivera que se convertiría posteriormente en su marido. En un primer momento ambos artistas entablaron una relación de amistad y de reconocimiento profesional (especialmente de Diego Rivera , que ya era un pintor consagrado, hacia Frida Kahlo).
Sin embargo tras un corto periodo de noviazgo, y a pesar de la oposición del entorno de Frida Kahlo, ambos decidirían casarse rápidamente. La pareja era peculiar no sólo por la diferencia de edad sino también por su diferente fisiología. De este modo, Diego era grande y corpulento y Frida menuda y muy delgada, por lo que se la pareja recibió el nombre del elefante y la paloma.
Artísticamente, en realidad Frida Kahlo tuvo una prolífica carrera pictórica, llegando a pintar más de 200 obras y siendo el retrato y especialmente el autorretrato una temática constante en la obra de la artista.
La temática de la obra de Frida Kahlo se caracteriza por su carga fuertemente autobiográfica, siendo su temática principal el autorretrato. Otra temática presente son por ejemplo los retratos y los bodegones. Su obra en general es encuadrada por algunos autores dentro del movimiento del realismo mágico y del arte naif.
En realidad, algunos de los componentes del surrealismo intentaron encuadrar la obra de Frida Kahlo dentro de este movimiento, aunque la autora siempre rehusó a que fueran así catalogadas. Frida Kahlo afirmaría que su obra no mostraba imágenes oníricas, sino que sus cuadros nacían de sus propias experiencias y vivencias personales. Es por este hecho que si observamos detenidamente la obra de Frida Kahlo, veremos un recurrente uso de símbolos, cargados de significado autobiográfico.
La obra de Frida Kahlo se influenció de movimientos contemporáneos a la artista como el expresionismo, el surrealismo o de la cultura indigenista mexicana por la cual Frida Kahlo siempre mantuvo una fuerte admiración.
Sin embargo si algo caracteriza a la obra de Frida Kahlo es su capacidad para saber impregnar con su esencia toda su obra, dejándonos de este modo un riquísimo legado de valor inigualable y irrepetible.
Frida Kahlo tuvo la suerte de gozar ya en vida del reconocimiento profesional de su marido Diego Rivera así como de artistas como André Bretón, Pablo Picasso, Marcel Duchamp o Vassily Kandisnsky, que siempre le animaron a continuar pintando. A pesar de ello el reconocimiento internacional no llegaría hasta la década de los 70, una vez ocurrida la muerte de Frida Kahlo en 1954.
Al inicio de la década de los 30 (de 1931 a 1934), el matrimonio Diego Rivera y Frida Kahlo se trasladaría a EEUU donde Diego realizó algunas de sus principales obras que no estuvieron exentas de polémica. En este periodo se producirán dos abortos que marcarían la vida de Frida Kahlo de manera fundamental, y que obligarán a Frida Kahlo a aceptar la imposibilidad de poder ser madre como consecuencia de las secuelas que el accidente de tráfico había dejado en su cuerpo. Este hecho, provocará muchísimo dolor a la autora que quedará plasmado en varios de sus cuadros como por ejemplo “Aborto en Detroit”.
Volviendo a la faceta profesional de Frida Kahlo, este periodo sería muy enriquecedor y prolífico para la artista. En relación a este periodo Diego Rivera afirmó: “Frida empezó a trabajar en una serie de obras maestras sin precedentes en la historia del arte, figuras que exaltaban la cualidad femenina de la verdad, la realidad, la crueldad y la pena. Nunca antes una mujer había puesto semejante atormentada poesía sobre la tela como Frida en esta época de Detroit.”
Tras su regreso a México, el matrimonio sufrió una gran crisis que ocasionaría el divorcio del matrimonio. Estuvieron separados durante un año, aunque retomarían su relación nuevamente en 1940, optando ambos por tener casas separadas que se unirían por un puente para que la pareja pudiera verse y mantener al mismo tiempo su espacio. La relación entre Frida Kahlo y Diego Rivera se mantendría hasta la muerte de la autora, aunque continuarían las infidelidades de ambos también es cierto que siempre mantuvieron un reconocimiento y una admiración mutuas.
Frida Kahlo mantuvo relaciones tanto con hombres como con mujeres, convirtiéndose en un icono actual de la libertad sexual y rompiendo una lanza hacia la libertad social e personal, que continua siendo reconocida a día de hoy.
Sin embargo la relación más importante en la vida de Frida Kahlo fue la establecida entre ella y Diego Rivera, en la que a pesar de las infidelidades mutuas siempre se mantuvo un afecto y una admiración profesional y personal. Las vivencias y sentimientos que Frida Kahlo experimentó en la relación con Diego Rivera han quedado plasmados en múltiples obras de la artista.
Pictóricamente la década de 1930 a 1940 es claramente floreciente para Frida Kahlo, gozando la artista cada vez más de un mayor reconocimiento.
En 1953 se desarrollaría en la Ciudad de México DF la única exposición monográfica en vida del artista. A pesar de tener un empeoramiento en su salud y de haberle los médicos prohibido su asistencia al evento, Frida Kahlo decidiría acudir y disfrutarlo. De este modo, Frida Kahlo se presentó en la exposición a pesar de tenerlo que hacer en la cama, viviendo y disfrutando del gran éxito y reconocimiento que logro.
La salud de Frida Kahlo ya no se recuperó, necesitando opiáceos para poder soportar el dolor. Su fuerza y vitalidad se mantuvieron hasta el final, buen ejemplo de esto fue como unos días antes de su muerte Frida Kahlo y Diego Rivera acudirían a una manifestación en contra de la intervención de EEUU en Guatemala. Sus ansias de vida y su fuerza se reflejarían en su última obra donde dejaría plasmada la siguiente frase “ Viva la vida”.
Frida Kahlo moriría el 13 de julio de 1954, siendo la última frase de su diario “Espero alegre la salida y espero no volver jamás”.
La admiración de Diego por la obra y pinturas de Frida Kahlo fue una constante que se mantuvo después de su muerte. De hecho fue el propio artista el que promocionó que la casa familiar pudiera ser convertido en Museo de Frida Kahlo. A pesar de manifestar su voluntad de ser enterrado junto con Frida, en realidad Diego Rivera no fue enterrado junto a ella por deseo expresó de sus hijas y de su última esposa.
El reconocimiento masivo internacional no llagaría hasta la década de los 70, jugando un papel fundamental la figura de Diego Rivera en el mismo.
Legado de Frida Kahlo
Nos encontramos ante una de las pintoras más importantes del siglo XX que se ha convertido en un icono de representación de la identidad femenina y de lucha y resistencia a favor de los derechos sexuales de los seres humanos.
Su personalidad y carisma únicos son modelo para las generaciones presentes y futuras y su legado artístico es considerado como uno de los más importantes y únicos de la historia del arte del siglo XX. Sin duda alguna el mejor reconocimiento que se puede hacer a la figura de Frida Kahlo es disfrutar del legado artístico irrepetible que nos dejo.
Frida kalho una mujer martir. Realista en exeso liberal sin tapujos su lucha personal sin definirse sentimientos masculinos o femeninos veces confundidos. Su optica de la vida de la forma mas atroz. Asi quizas su propia desgracia hera su arte